Hacer equipo para la vida

Por Déborah Buiza G. *
@DeborahBuiza
Imagina que eres un personaje de ficción en una película de acción y tienes una misión; para cumplirla exitosamente necesitas a un equipo (sí, eres un superhéroe, pero hasta ellos necesitan ayuda y no pueden hacerlo todo solos). ¿A quién llamarías para formar parte de él?
En la vida, a veces sin buscarlo o sin ser realmente conscientes de ello, vamos formando una suerte de equipo que nos acompaña en distintas misiones personales, profesionales o laborales.
Sin embargo, en muchas ocasiones, y también a veces sin darnos cuenta, lejos de rodearnos de gente que aporte, nos relacionamos con personas que nos restan energía, recursos, motivación e influyen de manera negativa.
¿Quiénes son estas personas? ¿Cuál es su propósito?¿Cómo identificarlas? En realidad, puede ser cualquiera. No es necesario que lo identifiques claramente como tu enemigo o alguien a quien le caes o te cae mal; incluso, puede ser de tu familia o del círculo más cercano de amigos (as) o colegas; puede ser alguien a quien quieras mucho, pero cuyos comentarios, actitudes y acciones resultan negativos, desafortunados, poco inspiradores, dañinos e hirientes (aunque sean sin mala intención, afortunadamente) y que te dejan una sensación de malestar o incomodidad, y a la larga, si lo permites, con dudas o temores que te impiden seguir adelante.
Si de alguna forma tu paso por la vida “dependiera” del equipo que conformes ¿escogerías a esas personas para formar parte de él? En tu vida, ¿hay alguien así?, ¿su presencia ha influido de manera positiva o negativa en ti o en tu vida?
De vez en cuando vale la pena revisar nuestras relaciones interpersonales y, por salud mental y bienestar personal, deberíamos preferir a quienes cuya presencia aporte crecimiento, felicidad, tranquilidad, conocimientos y fortaleza en algún sentido.
Busca relacionarte con gente positiva y con buena autoestima, que te inspiren a ser mejor persona. Rodéate de quienes te hagan sentir valioso y en quienes puedas encontrar apoyo, solidaridad, afecto y crecimiento. Limita los espacios y relaciones con las personas que no aporten positiva y significativamente a tu vida.
Siempre será mejor relacionarse con personas sonrientes, exitosas y con atributos positivos, que con quienes parecen estar en guerra constante con el mundo o que van por la vida tirando basura emocional a quien encuentran a su paso.
Y tú, ¿con quién haces equipo en tu vida?
* Terapeuta y especialista en Desarrollo Humano