¡Qué hay de nuevo… Viejo!
Por Araceli Mendoza
@Arinmaldoza
Este año, el Día Mundial de Toma de Conciencia del Abuso y Maltrato en la Vejez coincide con el inicio de la Década de las Naciones Unidas para el Envejecimiento Saludable (2021-2030), que marca el comienzo de diez años de colaboración en el sector para mejorar la vida de las personas mayores, sus familias y sus comunidades.
Entre 2019 y 2030, se prevé que el número de personas de 60 años o más aumente en 38 por ciento, de mil millones a 1.4 mil millones, superando en número a la juventud a nivel mundial.
Este crecimiento será especialmente mayor y más rápido en las regiones en vías de desarrollo, y requiere mayor atención a los desafíos específicos que afectan a las personas mayores, incluso en el campo de los derechos humanos. Todos serán viejos y, tal vez, con un boleto de discapacidad.
El maltrato a las personas mayores es un problema social que existe en los países desarrollados y en desarrollo y, por lo general, no se notifica suficientemente en todo el mundo. Tan solo en unos pocos países desarrollados hay tasas de prevalencia o estimaciones, que se sitúan entre el 1 y el 10 por ciento.
Aunque se desconoce la magnitud del maltrato a los ancianos, su importancia social y moral es indiscutible. Por tal motivo, el problema requiere una respuesta mundial multifacética que se centre en la protección de los derechos de las personas de edad.
Las formas de definir, detectar y resolver el maltrato de las personas mayores tienen que enmarcarse en el contexto cultural y considerarse junto con los factores de riesgo que tienen una especificidad cultural.
Desde una perspectiva sanitaria y social, si los sectores de atención primaria de salud y los servicios sociales no están bien preparados para detectar y resolver el problema, el maltrato a los ancianos seguirá.
El 15 de junio se celebra el Día Mundial de Toma de Conciencia del Abuso y Maltrato en la Vejez, Designado por resolución de las Naciones Unidas en 2011 y ratificada en la Convención Interamericana de los Derechos Humanos de las Personas Mayores de 2015.
El tema se oculta en todas las casas donde habita un anciano. Sí, está allí, pero nadie lo ve. Sufren de maltrato a diario, porque no sólo se necesita golpear a una persona adulta mayor; hay palabras muy hirientes que los sumergen en un estado de depresión.
Los golpes provienen casi siempre de un cobarde que vive cerca de ellos, que los lastima quitándoles su dinero, y vive en la casa del adulto mayor. El abuso no define sexo: hombres y mujeres son maltratados y abusados por igual, a veces hasta la muerte.
Es un tema difícil de resolver, porque cada adulto es único, como lo son también sus problemas. Enfermos, sin fuerzas para pelear o exigir sus derechos; con poco dinero para acudir a las instancias correspondientes, donde tienen miedo de perderse en un mundo de tanta gente; muchas veces su presión arterial les causa estragos y sus otras comorbilidades les impiden defenderse.
El trato de los ministerios públicos no observa la menor consideración con el adulto mayor; no hay ninguna persona de trabajo social para asistir a una persona que llega a declarar con la autoestima en el suelo, con la terrible impotencia que le causa el que sus seres queridos le estén lastimando, porque casi siempre es la familia la que maltrata al adulto mayor.
La conmiseración y el buen trato no existen. Son empleados jóvenes que no tienen idea de lo lastimado que puede estar el adulto mayor; existe una gran corrupción en estas instancias para no defender al adulto mayor.
¿Cómo cambiar en muchos lugares el trato al adulto mayor? Ahora los bancos, los restaurantes, informan con códigos QR, modalidad que cobró auge después de la pandemia.
Para muchas personas adultas mayores es un martirio acudir a una institución bancaria, donde le pedirán sus huellas digitales. ¡Caray! La piel del viejo no es la misma que la de un joven.
Todas estas problemáticas las enfrentan los viejos y, como escribí al principio, cada vez se suman más personas a esta etapa. El mundo no es de lo jóvenes, pero en la brecha de la tecnología, por supuesto que superan por mucho a los viejos, aunque jamás podrán hacerlo en humanidad, un sentido que no han desarrollado estas generaciones.
quehaydenuevoviejo760@yahoo.com.mx
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