top of page

¿Combaten la corrupción?



Por Omar Garfias

@Omargarfias


Todos los políticos dicen que son honrados.

Todos los gobiernos dicen que combaten la corrupción.

Todos, a lo largo de toda la historia de la humanidad.

Algunos, incluso, dicen que ya la eliminaron.

Revisemos los hechos, los datos duros, del manejo del dinero del gobierno federal.

El pasado lunes 17, el Instituto Mexicano de la Competitividad (IMCO) hizo públicos los datos oficiales, del gobierno. Puede consultarlos.

Una de las condiciones que favorecen la corrupción se da cuando el funcionario compra a quien se le antoja.

La empresa que le vende al gobierno recibe el dinero del pueblo sin haber demostrado públicamente dar el mejor precio o la mejor calidad.

Hay alto riesgo de corrupción porque se establece una relación de dependencia entre el funcionario y la empresa beneficiada.

No necesariamente sucede un acto ilegal, pero no es el procedimiento ideal para garantizar honestidad.

La adjudicación directa incuba corrupción con mayor facilidad.

En ello coincide el presidente López Obrador y en el Plan Nacional de Desarrollo prohíbe las adjudicaciones directas.

No hay forma de establecer un compromiso más fuerte con el pueblo de Mexico que hacerlo por escrito en el Plan Nacional de Desarrollo.

En 2018, último año del gobierno de Peña Nieto, el 36 por ciento de los recursos gubernamentales se entregaron a empresas mediante adjudicación directa.

En 2019, primer año de López Obrador, no desapareció esa forma de comprar, sino subió al 40 por ciento. En 2020 fue de 43 por ciento; en 2021, 39, y en 2022, 38 por ciento.

Las compras del Sector Salud son las que menos se hicieron por concurso. El 74 por ciento del monto de la adquisición de medicinas se adjudicó directamente.

El desabasto de medicamento se justificó por el combate a la corrupción, pero siguieron las adjudicaciones directas.

Logística Médica de Occidente fue inhabilitada en 2022. Sin embargo, el IMSS volvió a otorgarle tres contratos por adjudicación directa.

En Segalmex, en 2022, aún después del escándalo por irregularidades por 15 mil millones de pesos, sigue la falta de concursos. En las tiendas hizo compras por 19 mil 734 millones y adjudicó directamente el 90 por ciento, y en Liconsa, el 82 por ciento.

Otra forma de hacer trampa a la ley es licitar, pero esconder el concurso para que sólo los “amigos” participen.

El 45 por ciento de las compras públicas de 2022 fueron publicadas después de la fecha de inicio del contrato. Nueve por ciento lo hicieron meses después de que ya habían dado el anticipo al ganador.

Asimismo, más de 2 mil licitaciones públicas no cumplieron con la publicación completa de documentos, y el 4 por ciento de las compras no contó con una liga a Compranet, lo que impide conocer la información para participar en el proceso.

El sitio web de CompraNet, la plataforma pública de compras del gobierno federal, suspendió su servicio por 17 días durante julio de 2022. Algo que nunca había sucedido.

El gobierno no ha informado qué compras se hicieron en ese lapso, pero investigaciones periodísticas han identificado contratos por 20 millones de pesos entregados a la empresa del hijo de Manuel Bartlett, Cyber Robotics Solutions, misma que había sido inhabilitada por la Función Pública acusada de irregularidades como sobrecostos y por haber dado información falsa para ganar contratos.

En 2022, las instituciones públicas federales adjudicaron 2 millones 500 mil pesos a empresas fantasma, 107 millones 868 mil a empresas sancionadas y tres mil 474 millones a empresas de reciente creación.

Esta última modalidad de corrupción consiste en que el funcionario toma posesión e invita a sus amigos a que hagan una empresa para que les dé contratos.

Un ejemplo es “Grupo Huerta Madre” que ocho días después de protocolizarse fue invitada a un concurso que “ganó” para hacer obra en la refinería de Dos Bocas por 5 mil millones de pesos, en 2019. El dueño, compadre de Rocío Nahle, nunca había sido proveedor de Pemex.

Por otra parte, la decisión presidencial de inmovilizar parcialmente al INAI obstaculiza la vigilancia de las 174 mil 219 compras que hizo el gobierno federal.

“Limpiaremos la corrupción de arriba hacia abajo” prometió el presidente el 11 de enero de 2019.

En el escándalo de Segalmex han capturado a jefes de departamento y subdirectores, pero el director general está intocado y con nuevo puesto. Que los de abajo lo engañaron, justificó López Obrador.

Los boquetes por donde se cuelan los pícaros no están tapados.

Las leyes, contrapesos y mecanismos de control externo, vigilancia y castigo están más débiles.

Permítame terminar con una pregunta que borda sobre el papel de la corrupción en el sistema político.

¿Quién paga pintas, espectaculares, camiones y acarreo de las corcholatas? ¿Los agradecidos proveedores?

Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page