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Por Mayra Núñez P.
CAMINANDO por Hyde Park, uno de los parques más grandes en el corazón de Londres, este 21 de junio nos llamó la atención una mujer de mediana edad que estaba sentada sobre el pasto, muy derechita, con varias bolsas llenas de botellas, ropa, libros y otras cosas, leyendo un libro bastante desvencijado, que decía Banksy.
Banksy es el seudónimo de un artista británico que se inició en el graffitti.
Su trabajo, en su gran mayoría, son pinturas con mensajes políticos y crítica social implícitos.
Según Banksy, “una pared es un arma muy grande”. Por eso él pinta en la calle.
Y como también él dice:
"Mis obras fueron hechas en la calle y para la calle"... pero los trabajos de Banksy nunca han dejado indiferente al espectador.
Sus pinturas llevan una gran carga de mensaje, pero lo curioso es que también la obra de este artista, supuestamente incógnito y que está en contra del "establishment", es vendida en millones de dólares.
La última que se vendió -“La niña con globo”-, que se autodestruyó parcialmente durante una subasta en Londres hace tres años, fue vendido por 25.4 millones de dólares. En un comunicado, la casa de subastas Sotheby's describió la destrucción como el “happening artístico más espectacular del siglo XXI”, enmarcado en la herencia del arte contracultural que comenzó con el dadaísmo y Marcel Duchamp.
Me acerqué con mucho cuidado a la lectora de Hyde Park y le dije que me llamó la atención que estuviera leyendo sobre ese artista, ya que yo también había leído y sabia algo de él.
Pensé que no me iba a entender, porque ella más bien parecía de Amsterdam, pero me contestó que le gustaba mucho la obra de Banksy y que, de hecho, ya había ido a otras partes ex profeso a ver su obra. Habíaa estado en Norfolk y vio la pintura de una pareja bailando sobre el techo de una pared de autobús.
“Hombre escapa con una máquina de escribir”, pintada sobre el muro exterior de la cárcel de Reading, en Londres. La narrativa dice que el pintor hizo una propuesta para que la prisión se convirtiera en un lugar de arte.
Estaba yo en "shock" por su conocimiento y, por contraste, mi ignorancia. Ya en ese momento Luis, Geira y yo estábamos sentados en el mismo lugar. De pronto, se levantó y dijo que se iba; recogió todas sus pertenencias y se despidió con un "hasta luego" en su idioma: ucraniano.
Una vez más, caminando por el mundo, te topas con personas increíbles que dejan su marca personal.
Banksy estuvo en Palestina algunas veces y en cada visita dejó trabajos esparcidos en sus muros. Se cree que la primera estadía del artista pudo haber sido en agosto de 2005, cuando pintó trabajos en el límite entre Palestina e Israel. "Soldier throwing flowers" (Soldado lanzando flores) muestra a un sujeto en lucha con el rostro cubierto, quien arroja un ramo de flores en vez de un objeto bélico.
Brexit
En un puerto que enlaza al Reino Unido con Francia, en Dover, Banksy hizo un mural llamado Brexit, con un gran sentido del humor. La escena es alusiva a la salida del Reino Unido de la Unión Europea, y representa a un obrero que, en lo alto de una larga escalera de apoyo, elimina una de las estrellas de la bandera de la comunidad.
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